Calentamiento
Aunque en la práctica nos podemos ver envueltos en una situación de defensa personal sin haber calentado físicamente, conviene, para mejorar la forma física y evitar lesiones, realizar un calentamiento previo antes de realizar defensa personal.
En principio, puede servir cualquier calentamiento que se utilice en cualquier arte marcial, que combine resistencia, fuerza, flexibilidad, etc.
Si no tienes uno determinado, aquí tienes una serie de tablas de calentamiento.
Como hacerte respetar sin llegar a la violencia
Se puede discutir civilizadamente sin llegar a la violencia. Para ello hay que ser civilizado, no hay que tratar de ganar la discusión a toda costa, haz preguntas abiertas, y usa datos más que anécdotas.
Saber defender tus puntos de vista sin llegar al enfrentamiento es algo propio de las personas carismáticas. Para ello hay que:
1. Empatizar con la persona, haciendo que la otra persona no se sienta tonta. Hacer ver que puede tener algo de razón.
2. No tratar de hacer sentir como tonto/a a la otra persona, ni tratar de ridiculizarla.
3. Cambiar de tema, relacionando las cosas con la otra son rasgos de las personas carismáticas.
4. Si la otra persona cambia de opinión, no le hagas sentir estúpido, sino hacerle sentir bien.
5. Contar anécdotas ilustra una buena conversación.
6. Habla de temas que le interesa a la otra persona, relaciónalo con su vida. Eso hace que el tema tratado sea importante para la otra persona.
7. Usar arquetipos, modelos que se usan para imitar. Eso hace ser persuasivo. Contar una buena historia.
8. Incita al diálogo. Considera que puedes aprender algo bueno de los demás.
Finalizar rápido una pelea
A veces sin quererlo nos vemos envueltos en una situación muy comprometida. No queremos líos, sino que nos dejen en paz, pero hay personas que parece que no sirven nada más que para buscar conflictos.
El consejo lógico es huir de las peleas, pero hay veces que esto es imposible. Ha llegado la hora de defendernos.
Usa el lenguaje inteligentemente e intenta evitar una confrontación. Pero si el agresor parece dispuesto a no dejarnos en paz, prepárate teniendo en cuenta que no es un combate de boxeo con reglas. Se trata de dejar fuera de combate al agresor en el menor tiempo posible y con el menor daño.
Céntrate en sus puntos débiles: ojos, garganta, plexo solar, sienes y rodillas.
Si el agresor porta un arma, como un cuchillo, tienes que coger algo para defenderte, algo así como un palo o un objeto voluminoso.
Un cabezazo contundente puede dejarle fuera de combate en seguida. Mete la barbilla para dentro y ataca con la parte superior de la frente a su nariz, ojos o boca.
La cabeza siempre es una gran zona vulnerable y atacarla es la manera más rápida de acabar una pelea, pero no es fácil alcanzarla, y si no se está acostumbrado a golpear un saco fuerte de boxeo, endureciendo la mano, esta puede lesionarse. Eso es fácil de comprobar golpeando sin guante un saco de boxeo.
Para finalizar rápido una pelea, son necesarios, unos reflejos rápidos con una técnica adecuada. El entrenamiento con sparring es fundamental.
Escapa en cuanto el atacante esté incapacitado.
Técnicas para acabar rápido una pelea
No existen técnicas universales o generales, depende de nuestra constitución física, de la del atacante, del peligro de la situación, nuestra formación previa, etc.
Ojo, cuello, genitales (entre los hombres existe cierto respeto por este punto, ya que se le considera un acto de cobardía).
El puño de martillo en la cara es demoledor, sobre todo en la nariz. Con este golpe es difícil lesionarse. También se puede aplicar en la sien.
El directo también es bueno si se aplica con toda la fuerza del cuerpo, moviendo hombros y cintura. Hay que tener técnica, ya que nos podemos torcer la muñeca.
El codo y la rodilla son las partes más duras del cuerpo. Si un atacante te pega como un loco, le puedes golpear con un codazo ascendente. También lo puedes hacer en salto.
Si la situación se complica o el atacante nos está haciendo mucho daño, se pueden emplear técnicas de varias artes marciales, como el kung fu. Una de ellas es el ataque a los ojos, apretándolos. Esta es una técnica desesperada y la situación debe ser muy comprometida.
Un rodillazo al estómago o a los genitales, en este último caso si la situación se torna verdaderamente peligrosa. Pero para hacer un ataque de rodilla hay que tener técnica. La rodilla en el estómago debe penetrar de forma efectiva y contundente.
Si son varios los atacantes tenemos que usar técnicas muy rápidas y contundentes, que hay que entrenar previamente.
Lo mejor es no tener que usar las armas de nuestro cuerpo en una situación complicada. Pero las artes marciales no son sólo competición, sino supervivencia, y en una situación peligrosa, no hay reglas, no hay jueces, no hay árbitros.
Normalmente una pelea se inicia con un empujón inicial del agresor. Nos hacemos a un lado saliendo de la línea de ataque. Le podemos coger la cabeza.
Si nos lanza un puñetazo lineal, estar en alerta, para separarnos de la línea del frente y poder contraatacar de manera lateral.
Un golpe en la base de la nariz con la base de la mano desarma a cualquier agresor. Por detrás apretando la base de la nariz se le puede controlar y llevarle hacia el suelo.
Pero para poder hacerlo de una manera real hay que tener bastante práctica.
Muchas peleas callejeras se inician con el típico golpeo lateral con los dos puños. Si el agresor ataca nos metemos en su línea central con los brazos levantados atacando muy rápidamente.
Lo primero al meternos es bloquear externamente. Y lo segundo atacarle la nariz con puños de martillo, muy rapidamente con los dos puños.
Otra técnica seguida, para un adversario muy peligroso o contundente, es golpearlo con el talón en la espinilla o el menisco.
Es difícil, requiere práctica. Ideal practicarlo con un un buen maestro en un buen gimnasio.
El maestro Dani Galindo muestra técnicas para lograr un KO rápido en una pelea callejera.
La primera es atacar el nervio trigémino del lateral de la cara con un golpe de martillo o el talón de la mano.
La segunda consiste en un ataque en la base de la barbilla.
Estos golpes van dirigidos a descolocar la mandíbula.
Si la distancia es muy corta se puede golpear con el codo lateralmente o de abajo a arriba.
En la corta distancia golpeando en la base del estómago. Al agachar la cabeza se puede atacar la barbilla con un ataque de codo de abajo a arriba.
Un ataque a la rodilla con una patada lateral baja (low kick) a su pierna adelantada deja al atacante fuera de combate.
Ejercicios y explicación
Primeramente vamos a practicar que hemos visto, con codo, ataque con la base de la mano, puño de martillo, etc., sobre saco de boxeo y si no tenemos la oportunidad, lo haremos sobre una superficie blanca o un cojín, no lo haremos sobre una superficie dura o semidura, ya que podríamos lesionarnos. Debemos de intentar golpear con la máxima velocidad posible y la menor superficie, ya que el golpe será más penetrante y contundente.
Luego entrenaremos con un compañero o sparring, ideal con paos o protecciones. En el caso de no tener esta oportunidad ensayaremos los movimientos despecio frente a un espejo.
Si algo no ha quedado claro, repetiremos los vídeos una y otra vez.
Lo mejor, por supuesto, es practicar en un buen gimnasio o dojo, con un buen maestro.
Finalizamos lo indicado por el maestro Dani Galindo, no existe defensa personal sin entrenamiento constante, sin dificultad, sin buena forma física. Tienes que ser fuerte para defender a los débiles.
¡Hasta el próximo día!
Comentarios
Publicar un comentario