Saludo
Como ya vimos en la primera clase, para saludar, puño de la mano derecha cerrado a la altura del pecho y apoyamos la palma de la mano izquierda en los nudillos.
La segunda parte de las 18 manos de Lohan
Seguimos aprendiendo la forma de las 18 manos de Lohan, pero antes debemos repasar lo que vimos en las correspondientes clases, en las que estudiamos la forma de Lohan, primera parte y segunda parte.
Repasamos y practicamos los seis anteriores movimientos:
1. Posición inicial o de centramiento
2. Separar el cielo de la tierra
3. Separar cadenas de montañas con las manos
4. El Buda retorna a su origen
5. El tigre negro empuja la montaña o endereza su espalda
6. La grulla o el ganso extiende sus alas
Y a continuación aprendemos y practicamos los cuatro siguientes movimientos.
Niño adorando a Dios o a los tres Budas
Manos palma con palma, brazos rectos, inspirando subimos las manos por delante con las manos juntas. Subimos las manos por encima de la cabeza y nos estiramos de puntillas. Arriba del todo sólo mantenemos juntas las puntas de los dedos.
Exhalando, bajamos los brazos, manteniendo las palmas juntas en posición vertical, y descendiendo verticalmente.
Cuando las manos están a la altura del pecho, palma con palma, como rezando, nos ponemos en cuclillas.
Este ejercicio es muy recomendable para los dolores de la columna.
Cuando se estiren las piernas no ha de haber rigidez. Los codos se hallan separados del cuerpo, con cierta separación bajo las axilas.
Al mantener las manos unidas por la punta de los dedos, los puntos Laogong, se activan los mismos.
Lo podemos ver en la primera parte del siguiente vídeo:
El Buda o el guerrero sostiene el templo
Partiendo de la posición anterior de cuclillas, con las manos a la altura del pecho en posición de oración, nos levantamos inspirando, estirando primero las piernas, luego el tronco y finalmente las manos.
Separamos las manos con los brazos rectos. Las manos se hallan abiertas y con los dedos separados.
Miramos hacia arriba y nos inclinamos hacia atrás.
Exhalando, con los brazos rectos, doblamos el tronco hacia delante. Seguimos así hasta que las manos toquen el suelo. Las rodillas no se doblan.
Inspirando, estirar primero las piernas, luego el tronco y las manos. Inspirando un poco más, separar las manos con los brazos rectos. Mirar hacia arriba e inclinarse atrás.
Exhalando, doblar el tronco hacia delante. Seguir doblando el tronco hasta que las manos toquen el suelo. No doblar las rodillas durante el estiramiento.
Inspirando, flexionamos las rodillas, mientras vamos levantando lentamente el tronco y la cabeza, al tiempo que masajeamos las piernas con las manos, por detrás hacia arriba y hacia los lados del tronco, terminando en la zona lumbar.
Exhalando, nos colocamos de pie, llevando las manos a la parte central de la espalda, debajo de las costillas flotantes. Esto estimula la circulación por los meridianos yang. Viene muy bien para los dolores de espalda, y para el insomnio y el estrés.
Inspiramos. Realizamos un masaje con las manos por los lados del cuerpo, sobre el músculo del diafragma. Subimos por la línea central, por el cuello y acabamos en la nuca. Exhalando, las manos descienden por la cara, nariz, y boca y se terminan recogiendo en las axilas.
En esta posición, inspiramos, giramos la palma izquierda en círculo hacia dentro, quedando con el reverso de la palma hacia arriba. Exhalando, giramos la muñeca izquierda, repitiendo el mismo movimiento con la palma derecha.
Se puede ver en la segunda parte de este vídeo:
El Buda mira a su origen
Palma derecha hacia arriba, las piernas ligeramente flexionadas con el peso en la pierna derecha. Inspiramos y damos un paso con el pie izquierdo. Exhalando llevamos la palma derecha a la izquierda y los dedos puntan en este sentido. La palma izquierda la llevamos atrás y en este sentido apuntan sus dedos.
El cuerpo se inclina hacia delante e inspiramos. La pierna izquierda se estira y el peso pasa a la pierna derecha. Llevamos la palma derecha al pecho y la izquierda detrás del cuerpo tocándolo. Repetimos la misma acción, pero en el lado derecho.
Al echar la espalda hacia atrás, se trabaja la circulación por los meridianos de esa zona, activándose la zona lumbar y el meridiano del riñón. Desplazándonos hacia delante y espirando, almacenamos energía en el dantien. Este ejercicio es bueno para la columna y para problemas de impotencia sexual.
Se puede ver en la primera parte del siguiente vídeo:
Estirar o tensar el arco
Exhalando, describimos un círculo con el puño izquierdo vacío, mientras llevamos el puño derecho vacío al oído derecho.
Inspirando, giramos el cuerpo a la izquierda, llevamos el puño derecho vacío derecho frente a la cara y puño izquierdo vacío al oído derecho.
Exhalando, cambiamos el peso a la pierna izquierda, el puño derecho vacío se situa a la altura de la cabeza y el puño izquierdo vacío al oído izquierdo. Se repite el mismo movimiento, pero al lado derecho.
Al realizar el movimiento del golpe de puño, la pierna trasera se debe estirar completamente, porque así se estimula circulación del chi por el riñón y el corazón y por los meridianos.
Por otra parte, el movimiento de la serpiente moviliza la columna vértebra a vértebra, activando sus meridianos y el estómago, llevando el chi al dantien.
Este ejercicio es bueno para calmar la mente y para problemas de rigidez y lumbalgia en la espalda.
Se puede ver en el anterior vídeo, a partir aproximadamente del minuto y medio.
Saludo
Puño de la mano derecha cerrado a la altura del pecho, apoyamos la palma de la mano izquierda en los nudillos, al tiempo los alumnos dicen xie xie ni, o xie xie ni Sifu, que significa gracias a usted (maestro), y el maestro responde xie xie, gracias.
¡Hasta la próxima clase!
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